En el siglo XVIII, el espadachín Scaramouche ayuda a los desfavorecidos y lucha contra la injusticia. Enésima revisitación del famoso personaje del cine de aventuras, poniendo al descubierto el erotismo que con anterioridad se había simplemente insinuado. Sin embargo, todo está montado de manera harto rudimentaria, tanto desde el punto de vista de la acción como del propio erotismo. La presencia de Ursula Andress se agradece pero no compensa.