La noche ha sido cuanto menos desatada, pero hay dos versiones muy claras: Mirella confiesa a Ruth y Kate que se ha dado algunos besos con Rafa durante la noche y ellas alucinan con la noticia. Pero por otro lado, Rafa asegura a Luis y Gabriel que no ha ocurrido absolutamente nada con Mirella, a pesar de que Luis sospecha de su amigo al escuchar “unos ruidos raros”. Mientras, Lara tiene la mosca detrás de la oreja y se teme lo peor en el próximo e inminente reemparejamiento.