Manuela viaja por la noche con la niña hasta Madrid mientras ensayan lo que dirán a partir de ahora: que son madre e hija y que la pequeña se llamará Paloma. Pero su llegada a Madrid no va a ser fácil, cuando Manuela descubre que le han robado la cartera con el dinero y las tarjetas. Llama a su hermana Alejandra, para pedir ayuda, pero ésta no contesta.