La gestión de Antonio Dumas al frente del Museo Iberoamericano de Arte Moderno conlleva nuevos choques, acuerdos, sorpresas y aspectos absurdos y delirantes que extreman los límites de la creación artística y de la gestión institucional. Paralelamente, la creciente presencia de su exmujer, una artista antisistema radicada en la selva peruana que representa las antípodas de su pensamiento, le irá generando conflictos internos hasta transformarse en una verdadera pesadilla.