Herman se las arregla para encontrarse con Marilyn en el museo de historia natural. Pero accidentalmente se encerra dentro de un sarcófago egipcio, por lo que entra en efecto una pastilla para dormir que tragó antes. Un par de conservadores del museo abren la caja al día siguiente y confunden al durmiente Herman con una momia antigua. Cuando Lily lee acerca de su supuesto descubrimiento científico en el periódico, va al museo y le pide a los curadores que coloquen a Herman en un taxi y lo envíen a casa tan pronto como se despierte.