El perdón no es algo fácil de hacer, especialmente para Luther y Belfry. Theo intenta ayudar a sus pequeños amigos peludos a comprender qué significa perdonar y por qué es tan importante. Theo comparte la parábola del “Siervo que no perdona”, esta es una historia de gran ejemplo de por qué el perdón es un acto especial de amor que los cristianos deben mostrarse unos a otros.