Marzo de 1935. Uno de los mafiosos más duros de la ciudad de Nueva York es el holandés Schultz. Él y su pandilla fueron responsables de más de 100 asesinatos. El holandés está en todos los negocios: licores, narcóticos, contratos laborales, el juego de los números, la venta de protección. Pero "Lucky" Luciano está entrando en su territorio; para tratar de evitar que sus clientes le paguen a Luciano, Dutch Schultz hace que sus hijos utilicen sus puños sobre con sus clientes. Cuando Joe Floris no pagará el 30% del dinero de protección a Schultz, diciendo que ya está pagando el 15% a Luciano, Joe Floris recibe un poco de ácido en la cara, cegándolo. Pero Dutch también tiene un lado más amable: su esposa acaba de tener un bebé.