A medida que se aproxima la segunda guerra mundial tanto la Alemania nazi como su aliado Japón plantean la construcción de acorazados gigantescos, unos acorazados enormes, los más grandes del mundo y están diseñados de tal forma que son imposibles de hundir. Japón no se detendrá ante nada para conquistar el pacífico. Los japoneses dispuestos para vencer a sus enemigos construyen en secreto el mayor buque de guerra con un blindaje impenetrable y cañones de 20 metros cuya misión es destruir la flota estadounidense del pacífico. Esta es la historia de los titanes del mar, los megabuques de Japón.