En el viaje a Múnich, la joven diseñadora de moda Julia conoció mejor a su padre Vincenzo: él y su madre Tanja llevaron una vida como la de Bonnie y Clyde a finales de la década de 1970. Julia finalmente se entera de las circunstancias en las que el viaje amoroso de su abuela Giulietta con Alexander terminó fatalmente. Una manguera de freno rayada había provocado que el coche se estrellara. La sospecha recae sobre Enzo.