Con los Beanie Babies que alimentaron la histeria y Harry Potter que cambió el paisaje literario, los años noventa fue la década de la locura. El cantante de música country Garth Brooks lideró las listas de música pop, el lema "Must See TV" dominó la pantalla, y las frases contagiosas nos invadieron a todos. Este fue el último adiós de la cultura masiva antes de que Internet cambiara todo.