Ricky se deprime cuando siente que su publicidad está disminuyendo, y que ya nadie se interesa por él. Eso hace Lucy tenga una idea para levantarle la estima, la cual implica que ella se haga pasar por la exótica “Majaristeza del Franistan”, una mujer de la realeza que viene de un país lejano, atravesando medio mundo, solo para oír cantar a su ídolo, Ricky Ricardo…