Esta semana volvemos a colgar la bola de espejos y lanzarnos a la pista de baile para disfrutar con la música disco española de los 70 y principios de los 80, el periodo del superboom en España, cuando las canciones se llenaron de sintetiza orquestales, coros sensuales. Hasta el artista más alejado de ese estilo se apuntó al sonido de moda, y se puso en manos de los productores más audaces intentando ampliar su universo musical o, aspirando a ser el Boney M hispano del momento.