Shimojou Ryoko (Ueno Juri) se pasa la vida jugando a las máquinas tragaperras. Abandonada por sus padres cuando era muy joven, Ryoko pasaba de una relación a otra, buscando siempre la estabilidad pero acabando decepcionada una y otra vez. Un día se despertó y encontró a un joven muchacho, Kentai, sentado en su habitación y con una nota de su novio Kenji. Kenji, le pedía a Ryoko que cuidara del chico por unos días. Ryoko, la persona que siempre había deseado ser querida, está a punto de descubrir lo que es querer a alguien...