Murumo tiene un problema, y es que come muchas esponjas y no se lava los dientes. Cuando Mirmo lo descubre, llama al Doctor Denta, el dentista del mundo muglox. Murumo, asustado, huye por la ciudad del dentista, causándole problemas a sus compañeros para capturarlo. Una vez atrapado, Denta se dispone a limpiarle las caries con ayuda de Mirmo y Rima.